domingo, 28 de diciembre de 2008

A propósito del libro

Aires de agradecimiento...


"La gratitud es la memoria del corazón"
Jean Baptiste Massieu


Que salga a la luz una nueva publicación constituye un pequeño logro, se puede hablar de la obra, pero en este caso prefiero agradecer a aquellas personas que me brindaron su apoyo, orientación y afecto...

Como dije en esa oportunidad, aprendí que un libro, no sale sólo con horas de silla, ni con el aliento de personas, ni con ese toque de voluntad política, pero cuando se conjuga todo esto, si es posible que se materialice…

Y ahí van mis desordenadas y desprolijas menciones:

a mis padres, por enseñarme que la perseverancia y el estudio tenían premio, a mi padre que ya no está y a mi madre que compartió su presentación...

a mi hija, porque estas cosas se hacen también para dejarles un país mejor...

a Mariano Fontela, por todo lo que contribuyó para su concreción y a mis compañeros de la Dinarc...

en la Dirección, en especial a Alicia Suárez por su apoyo y a Patricia Hermida, por su visión, respaldo y por creer en una dinámica de trabajo donde se prioriza el diálogo, la construcción colectiva y la gestión del conocimiento.
Gracias por la confianza y el apoyo institucional y es menester señalar que constituye un verdadero honor que el Sr. Ministro del Interior haya prologado esta pequeña obra.

Dicen que los mejores maestros son aquellos que saben transformarse en puentes y que invitan a sus alumnos a franquearlos, por eso quiero mencionar también personas que me enseñaron y aleccionan de distintas maneras:

a Luis Warat, por ayudarme a descubrir que otro derecho es posible...

a Elsa Laurelli, por inyectarme confianza y ayudarme a comprender que la cuestión territorial es un mundo...

a María García Pizarro, por sus conmovedoras y afectuosas palabras que llegaron mágicamente a través del atlántico...

a Daniel Baraglia, por demostrarme que lo municipal puede ser una pasión y compromiso a lo largo de todo una vida...

Por último a dos personas de mi generación por la cuales tengo una profunda admiración y respeto profesional:


A Fabio Quetglas, el cual con su pensamiento inquieto nos ilumina en temas de desarrollo...

y a Enrique Machiaro por la inteligencia en sus enfoques del derecho...

Es difícil expresar sentimientos cuando la razón se interpone, pero siento que debía dejar estas palabras de gratitud, por ello simplemente les digo:

mil gracias!!!



LF

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